Las personas estamos cada vez más concienciadas no sólo con la huella que dejamos en el planeta, sino también con el impacto ambiental de los productos y servicios que consumimos. En este contexto, es cada vez más habitual que los consumidores y consumidoras exijan a las empresas demostraciones de su responsabilidad ambiental. Es, por tanto, fundamental que las organizaciones comuniquen de manera clara y transparente el desempeño ambiental de sus productos y servicios. Sin embargo, es común confundir el etiquetado ambiental con la declaración ambiental, dos herramientas clave que, aunque relacionadas, cumplen funciones distintas.
¿Qué es el etiquetado ambiental?
Las etiquetas ambientales son un tipo específico de etiquetas ecológicas. Se presentan como símbolos de confianza, distintivos de calidad u otros signos que destacan y promocionan un producto, proceso o empresa en función de su desempeño ambiental. Con frecuencia, estas etiquetas se apoyan en esquemas de certificación, los cuales verifican que el producto, proceso o empresa cumpla con ciertos criterios ambientales establecidos y supervisan que se mantenga ese cumplimiento.
Este etiquetado permite que las personas consumidoras identifiquen fácilmente productos que cumplen con ciertos estándares ambientales, contribuyendo a la promoción de prácticas de consumo más sostenibles.
Algunas de las ecoetiquetas más conocidas a nivel global incluyen: Ecoetiqueta ecológica europea ecolabel, FSC…
¿Qué es una declaración ambiental?
Una declaración ambiental es cualquier afirmación o representación, no exigida por las leyes de la Unión Europea o nacionales, que puede manifestarse a través de textos, imágenes, gráficos o símbolos. Estas declaraciones se presentan en etiquetas, marcas, nombres de productos o empresas dentro de un contexto comercial y sugieren que un producto o empresa tiene un impacto positivo o neutro en el medio ambiente, es menos perjudicial que otros, o ha mejorado su desempeño ambiental con el tiempo. Ejemplos comunes incluyen frases como: «Este producto consume un 20% menos de energía que el modelo anterior» o «El 80% de los ingredientes provienen de fuentes sostenibles.»
Un estudio encargado por la Comisión Europea en 2020, tras analizar 150 declaraciones ambientales encontró que:
• 53’3% de las declaraciones ambientales en productos y servicios brindan información vaga, engañosa o infundada.
• 42% de las declaraciones tenían la duda razonable de que la afirmación pudiera ser falsa o engañosa
CARACTERÍSTICA | ETIQUETADO AMBIENTAL | DECLARACIÓN AMBIENTAL |
OBJETIVO | Comunicar al consumidor de forma sencilla y rápida el desempeño ambiental superior de un producto en comparación con otros similares. | Proporcionar información cuantitativa y cualitativa sobre el desempeño ambiental de un producto a lo largo de su ciclo de vida. |
CRITERIOS | Estrictos, basados en análisis de ciclo de vida y evaluación de múltiples aspectos ambientales (energía, materiales, residuos, etc.). | Más flexibles, permitiendo a las organizaciones elegir qué aspectos ambientales destacar. |
VERIFICACIÓN | Realizada por terceros independientes acreditados, asegurando la objetividad y fiabilidad de la información. | Autodeclaración de la organización, con posibilidad de verificación por terceros. |
ALCANCE | Generalmente se aplica a productos completos. | Puede aplicarse a productos, procesos o servicios, con un nivel de detalle variable. |